Hoy he comido con unas compañeras de estudio, de cuando estudiaba higiene dental hace ya unos cuantos añitos. Era una quedada que me apetecía mucho, la verdad. Llevábamos algún tiempo intentado juntarnos y hoy ha sido posible.
Este tipo de actos me reconecta con mi esencia, con quien soy yo realmente y pienso que el verano es una buena época para hacer todo aquello que durante las otras épocas del año no somos capaces de hacer, principalmente por nuestras obligaciones.
Además, y sin entrar por caminos místicos ni nada parecido, estos actos nos ayudan a conectar con quienes verdaderamente somos, porque muchas veces nuestra verdadera esencia esta debajo de capas tales como «quienes quieren que seamos», «quienes creémos que somos » y muchas veces olvidamos la capa más importante que es «que somos realmente»
Reitero, no hablo de viajes hacía lo más inconsciente de nuestro ser. Hablo de reconectar con ese yo, con lo que éramos antes de ser madres de, trabajadoras de, parejas de … con el simple hecho de recuperar hábitos que nos hacían felices..
Cuando entramos en una rutina, la mayoría de las veces nos colocamos las últimas de la fila en cuanto atención y cuidados.
El verano es un buen momento para reconectar y recuperar nuestra esencia; es la época del año perfecta para hacer cosas que nos gustan hacer y que muchas veces olvidamos. Son unos días perfectos para quedar con la gente que no vemos a menudo pero que en realidad son motores importantes para nosotras.
Creo que esta es la temporada ideal para cargárnos con ese chute energético que nos ayuda a afrontar la rutina.
Según expertos, esa reconexión con nosotros mismos es tarea obligada durante todos los días por un mínimo de 20 minutos. Esos minutos, hay días que para mí son una barbaridad. Si bien es cierto que busco tiempo para hacer mis caminatas o andar en bici, todos los días me es impossible. Y lo que es peor. Hay semanas que ni un día.
Sé que algunas mamis lo consiguen y sacan su tiempo para el gimnasio, para la meditación, que se reconectan cocinando o se regalan duchas con velas, aceites y aromas varios.
Este es un llamamiento para las que como yo, de repente ven que ha pasado el día y quizás ni nos hemos visto en el espejo. Aprovechad el verano para hacer lo que realmente os gusta a vosotras; haced submarinismo, conducid una moto acuática, subid al Aneto, pasad el día en un spa, queda con tus amigas, con esas que no ves hace demasiado.Haz todo aquello que a tí te gusta hacer y que de manera casi immediata te van a llenar de energía para una buena temporada.
Haz todo aquello que te conecte con tu ser. Además, creo que esto también ayuda a estar bien con todo lo que nos rodea; a estar más a gusto en mi casa y con los míos. Que nadie me malinterprete. Soy muy feliz siedo madre, esposa y artesana/empresaria. Pero además, y creo que, sobretodo, soy Lídia. Esta es la base para que todo a mi alrededor funcione para mí.
Aprovechad el verano que nos queda.
¡ Feliz Lactancia !